DEMAGOGIA BARATA

Recuerdo ese pobre viejecito que pasó un día por Europa y el juez Garzón se empeñó en joderle la jubilación. Pero para eso estaba Aznar, para defender a los desvalidos enfermos. A pesar de que el desvalido y enfermo viejecito fue responsable de casi 3000 muertes. Sí, sí, 3000 víctimas inocentes. El fallecido Pinochet disfruto de la gracia del Dios protector de los fascistas. Y no, esta vez no era Zapatero, si no Aznar, el intachable.  Y ahora esta gente de derechas va de salva-patrias, criticando la excarcelación de De Juana (no olviden que a mí también me resulta un tipo absolutamente repulsivo), pero no me queda más remedio que admitir que se basa en términos perfectamente legales. Ah, vaya demagogos incendiarios. Como Montijano no contéis conmigo en las manifestaciones.